Baños de bosque, la medicina forestal que llega desde Japón
Creemos que lo sabemos todo sobre la naturaleza, pero cada día descubrimos cosas nuevas que nos sorprenden. Los japoneses hace años que exploran los beneficios de los baños de bosque. Recientemente, esta famosa práctica se ha ido extendiendo hasta llegar a occidente.
¿Qué son los Baños de Bosque?
Shinrin-Yoku, es un concepto japonés que traducido significa literalmente “baño de bosque”. Hace referencia a pasear en silencio por bosques viejos y que, habitualmente van acompañados de ejercicios de respiración y relajación.
También conocida como medicina forestal, es una terapia que se practica con el objetivo de mejorar la salud, el bienestar y la felicidad de aquellas personas que lo practican. Está inspirado en prácticas budistas ancestrales y en el sintoísmo, una religión nativa de Japón que venera los espíritus de la naturaleza. El concepto de Shinrin-Yoku empezó a usarse en los años ochenta. La Agencia Japonesa de Bosques impulsó los paseos por sus bosques como manera de combatir el estrés laboral. Actualmente forma parte de un programa nipón de salud nacional.
El bosque no es un elemento inerte, sino que está vivo. Los árboles más viejos segregan unos aceites esenciales. Estos, al ser inhalados por los humanos permiten activar partículas del sistema parasimpático. Permite que el cuerpo se relaje y deje de estar en alerta. Por otra parte, también activa el sistema inmunológico, que puede ayudar a luchar contra determinados virus y tumores.
¿Cómo practicamos los Baños de Bosque?
La Asociación de Terapia de Bosque y Naturaleza de Estados Unidos indica que hay una serie de pautas necesarias para beneficiarse de los Baños de Bosque:
- Conectas con la naturaleza: para captar todos sus beneficios debemos estar plenamente conscientes de donde estamos y abrir todos nuestros sentidos hacia la naturaleza.
- No hay prisa: debemos estar concentrados en conectar con el bosque y no en hacer ejercicio físico. Por esto de recomiendan paseos de más o menos un kilómetro y medio y que dure entre dos y cuatro horas.
- Con una vez no basta: los baños de bosque requieren de constancia para poder llegar a desarrollar una relación con la naturaleza.
- No solo se trata de pasear: aunque pasear es uno de los ejercicios para realizar, también hay otras rutinas a seguir como sentarse o establecer conexión con los seres vivos que habitan en el bosque.
- Prestar atención: debemos dejar que la naturaleza nos transmita todo su potencial, así como prestar atención a todos los mensajes que nos da.
- Dejarse guiar: como cada deporte o práctica, los baños de bosque también tienen que ser guiados por una persona experta en ellos.
¿Qué beneficios tiene?
Se han hecho estudios que han analizado los beneficios, tanto físicos o psicológicos de practicar los baños de bosque. Algunos de ellos son:
- Mejora el estado de ánimo: se ha podido ver que las personas que dedican paseos a partir de 40 minutos por un bosque tienen mejoras en su estado de ánimo y su sentimiento de salud se ve incrementado.
- Adiós al estrés: se ha observado que hay un claro descenso de la hormona del estrés (cortisol), condición que se relaciona en múltiples patologías. Algunas son: dolores de cabeza, presión sanguínea alta, problemas de corazón, asma, artritis… Una sobreexposición al cortisol aumenta el riesgo a sufrir ansiedad, depresión, enfermedades del corazón…
- Refuerza el sistema inmune: con el estrés el sistema inmunitario se ve afectado, por lo que si reducimos el cortisol este sistema se ve claramente beneficiado.
- Mejora la memoria a corto plazo un 20%: La Universidad de Michigan publicó un estudio dónde concluye que las caminatas pueden tener un efecto reparador en nuestra memoria y capacidad de concentración.
- Otros beneficios: el baño de bosque también incrementa la creatividad, mejora el descanso, ayuda a conservar la energía, reduce el ritmo cardíaco y ayuda a incrementar la actividad intestinal.
La frecuencia mínima aconsejada de “bañarnos en el bosque” es de un día a la semana, pero a veces se hace difícil debido a la falta de tiempo. Por este motivo, podemos aplicar esta terapia en casa aumentando el número de plantas. Disfrutar de la naturaleza con la jardinería o el bonsái nos puede conectar con la naturaleza. Prestando atención en lo que tocamos y observamos conseguiremos así calmarnos y relajarnos. Otra opción disponible, es visitar el parque de nuestra ciudad abriendo todos nuestros sentidos.
Artículos relacionados
Sobre el autor
Mistral Bonsai
En Mistral Bonsai somos un equipo de comunicación, técnicos y maestros comprometidos desde el primer día con la que divulgación del maravilloso arte del bonsái. Un mundo, sin duda, con muchas cosas para compartir. Creemos que un bonsái es un árbol con alma, único e irrepetible. Otro de nuestros pilares más esenciales es, como no podía ser de otra manera, el estrecho compromiso para preservar el Medio Ambiente y la naturaleza.
Categorías
Bonsái caduco (1)
Bonsái Shohin (1)
Bonsái verano (1)
Cactus (3)
Cerámica bonsái (3)
Coníferas bonsái (1)
Corporativo Mistral Bonsai (11)
Cuidados del bonsái (66)
Cultivo del bonsái (50)
Cultura china (2)
Cultura Japonesa (24)
El bonsái (62)
Eventos (10)
Flora (3)