Etapas de crecimiento del pino bonsái

Los Pinos bonsái traen consigo una serie de conceptos que, para aquellos que se inician en el mundo del bonsái o de las coníferas, pueden resultar desconocidos o confusos. Uno de estos conceptos, clave en el cuidado de los pinos, es la distinción entre los pinos de una o dos etapas de crecimiento, lo que conocemos también como pinos de una o dos oleadas. Conoce las etapas de crecimiento del pino bonsái.

Este concepto hace referencia a las fases de crecimiento que presentan los pinos a lo largo del año.

¿Qué es un pino bonsái de una oleada?

Los pinos de una oleada solo experimentan una fase de crecimiento durante el año. Después de la brotación de primavera, las yemas nuevas y las agujas crecerá sin dar lugar a una segunda oleada en ese mismo año. Algunos ejemplos comunes de pinos de una oleada son el Pinus sylvestris y Pinus pentaphylla. El cuidado de estos pinos bonsái es más predecible, la poda y el pinzado se planifican en torno a esa única etapa de crecimiento. Después de primavera, la energía del árbol se dirige a consolidar el crecimiento ya generado. Es importante evitar una poda drástica a finales de verano o en otoño, evitando así debilitar el árbol.

¿Qué es un pino bonsái de dos oleadas?

Los pinos de dos oleadas son aquellos que pueden experimentar dos ciclos de crecimiento en un año. Es el caso del Pino negro japonés (Pinus thunbergii) o el Pino blanco (Pinus halepensis). Tras la poda a finales de febrero y un aclarado a principios de setiembre, pueden producir una segunda brotación durante el invierno.

Esta segunda oleada permite más oportunidades para moldear el árbol y ajustar su crecimiento, pero también requiere un conocimiento más avanzado del manejo del bonsái. Los pinos de dos oleadas permiten técnicas de poda más agresivas, ya que el árbol tiene la capacidad de regenerar ramas y agujas en la segunda brotación, permitiendo el posterior aclarado y favoreciendo así  la disminución del tamaño de las agujas.

Diferencias clave en el cuidado

La distinción entre fases de crecimiento, no solo afecta a la frecuencia de brotación, sino también a las técnicas de cuidado requeridas. A continuación, destacamos algunas diferencias clave:

1. Poda y pinzado. Los de una oleada requieren una planificación cuidadosa de la poda en primavera, mientras que los de dos oleadas permiten un aclarado a principios de setiembre adicional después de la primera brotación.
2. Abonado. En los pinos de una oleada, el abonado debe ser moderado después de la fase de crecimiento. Para los de dos, se puede fertilizar de nuevo apoyando el segundo ciclo de crecimiento.
3. Modelado y alambrado. Los pinos de dos oleadas permiten mayor flexibilidad en la formación del árbol debido a su doble ciclo de brotación (poda a finales de febrero y aclarado a principios de setiembre); mientras que en los de una oleada se debe ir con más cuidado para evitar daños a largo plazo, realizando los trabajos de alambrado a finales de invierno.

Cómo identificar el tipo de pino

Identificar si un pino bonsái es de una o dos oleadas es esencial para proporcionarle los cuidados adecuados. Por lo general, los pinos negros japoneses son de dos oleadas, mientras que los Pinus sylvestris y Pinus pentaphylla suelen ser de una. No obstante, siempre es recomendable investigar específicamente tu árbol para asegurarte de que lo estás cuidando correctamente.

Comprender este concepto, es clave para aquellos que quieren dominar el arte del bonsái. Esta distinción no solo afecta al ritmo de crecimiento, sino que también determina las técnicas de poda, alambrado y fertilización que deben aplicarse. Ayudando a planificar el mejor camino para su desarrollo y lograr un árbol sano y equilibrado.

Con este conocimiento, estarás más preparado para cuidar de tus pinos bonsái y aprovechar al máximo su potencial.

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